Para conservar y evitar la pérdida de humedad del pan puedes almacenarlo a temperatura ambiente en una panera o bolsa de papel si el pan se va a consumir en un día o dos. Para evitar que se proliferen esporas de moho es conveniente guardarlo en un sitio fresco y oscuro dentro de una bolsa hermética. Si quieres guardar el pan durante más tiempo, también podemos congelarlo y envolverlo bien en papel aluminio o en plástico.
Se aconseja no guardar el pan en la nevera ya que puedes conseguir que éste se endurezca antes que a temperatura ambiente por el hecho de que el aire seco de la nevera extrae la humedad de los alimentos.